“El indio solo tiestos”
- tejedoresipes
- 10 may 2017
- 2 Min. de lectura
“Bienvenido señor”
¿Cómo está usted?
Cuénteme…. ¿en qué le puedo servir?
Esta es la manera como el señor Luis Emilio Tonarosa, comerciante de la plaza distrital de mercado 7 de Agosto atiende a los clientes que pasan por los pasillos donde se ubica su negocio de artesanías “El indio solo tiestos”.
“Hace muchos años tuve un cliente de origen indígena que me compraba mucho mis artesanías, pues consideraba que tenían unos terminados muy bien elaborados. Un día me invitó a tomarme un café y en medio de la charla me dijo que tenía un local en la plaza distrital 7 de Agosto y que le gustaría que lo trabajáramos juntos. No lo pensé dos veces, agradecí su confianza en mí y hoy el negocio lleva este nombre en honor a él, que siempre que llegaba me decía “bueno don Luis, que tiestos tiene para mí”, expresa Luis Tonarosa.
La experiencia de este cachaco, que trabaja atendiendo público hace más de 40 años, es evidente. En el momento de atender a un cliente no solo lo hace con naturalidad, su tono de voz, su expresión corporal y su infinita amabilidad lo han hecho un hombre exitoso en las ventas, catalogado por muchos de sus compañeros como el mejor vendedor y el negocio de mayorfacturación dentro de la plaza.

Es inevitable ir a la plaza y no entrar a Solo tiestos, así sea solo por curiosear. Este espacio no solo tiene gran variedad de productos artesanales y para el hogar colgados en sus paredes, los colores, tamaños y objetos únicos lo hacen llamativo y quien se acerca a hablar con ese gran vendedor, así no vaya con intención de comprar, termina convencido y por lo menos un estropajo se lleva para su hogar.
Todo tipo de artesanías hechas en barro, alcancías, molinillos, objetos miniatura, vasijas, ollas para el hogar, el jardín y elementos de aseo hacen parte del gran inventario exhibido al costado sur oriental de la plaza.
Detrás de esta historia de emprendimiento y ganas de salir adelante, de un hombre que toda la vida soñó con ser empresario y que lo ha construido con esfuerzo y dedicación, existe una bellísima obra social.
“Yo empecé a trabajar desde muy pequeño y todo lo que tengo lo he hecho solo con sacrificio y poniéndole ganas a la vida. Hoy mi negocio marcha muy bien pero soy consciente que hay mucha gente que, como yo, está empezando y eso no es que sea muy fácil. Por eso mis proveedores son personas emprendedoras oriundas del Tolima y el Huila que trabajan muy bien las artesanías y que como yo quieren llegar algún día a tener su propio negocio”, comentó el señor Tonarosa.
La historia de este humilde artesano es una clara muestra de superación, que evidencia que los sueños se hacen realidad cuando hay perseverancia y constancia.
Comments